jueves, 15 de septiembre de 2016

La Comunicación y el Lenguaje


Te ha pasado alguna vez que hablas con alguna persona y esta te dice no te estoy entendiendo y toma un tiempo hasta que logran entenderse mutuamente y es que la comunicación consiste en un emisor que envía el mensaje, un receptor que recibe el mensaje, el mensaje en sí mismo y el medio ambiente en donde se desplaza el mensaje.

El mensaje no siempre va en palabras, también puede ser transmitido en gestos, miradas, señas y otras a eso también se le denomina lenguaje no verbal, este lenguaje no verbal también incluye lo que nosotros queremos comunicar al mundo, con nuestra actitud, vestimenta, peinados y más.

Me ha pasado también en varias ocasiones con algunas personas pero con más frecuencia con mi esposa, que cuando me hace una pregunta en la que debo decidir o escoger algo en particular, ella termina afirmando cosas con respecto a lo que no escogí por ejemplo cuando me pregunta, que pantalón te gusta más, el negro, el marrón o el verde, yo le respondo el pantalón negro, automáticamente ella comenta, ah entonces el marrón y el verde no te gustan. Pero yo no dije eso, yo solo dije que el pantalón negro era el que más me gustaba.

Recuerdo que cuando trabajaba para un programa social del estado, yo le reportaba a un director y cada vez que ingresaba a su oficina para reportar algo o simplemente para conversar, el siempre me hablaba sin dejar de escribir en su computadora, mirando todo el tiempo a su pantalla, y en algunas ocasiones respondía las preguntas que le hacía y muchas otras me pedía que repitiera lo que estaba diciendo, para él  (bajo su percepción) me estaba escuchando, pero para mí, su lenguaje no verbal era interpretado como falta de interés a lo que le estaba diciendo o hacia mí.

Es importante recordar que:

Entre lo que pienso,
Lo que quiero decir,
Lo que creo decir,
Lo que digo,
Lo que quieres oír,
Lo que oyes,
Lo que crees entender,
Lo que quieres entender,
Lo que entiendes,
Existen nueve posibilidades de no entenderse.

Es por eso que para que exista una buena comunicación se debe verificar que el mensaje haya llegado claro y que sea interpretado de acuerdo lo esperado. Se suele pensar que el mensaje es distorsionado por parte del receptor, y se suele pregunta: “¿Me entendiste?”, dejando la responsabilidad de la comunicación al receptor. Hace muchos años una persona que estimo mucho y que además fue mi jefa me dijo, preguntarle a alguien si te entendió o no, da a entender que tú eres superior a la otra persona y que debes verificar que tan bruta es la otra persona, pero y que tal si el mensaje no se emitió con claridad, es por eso que uno debe preguntar, “¿Me deje entender?”, o “He sido claro?”, colocando la responsabilidad al emisor, el cual tiene la potestad de modificar el mensaje si este no ha llegado con claridad al receptor.

Es recomendable no generar suposiciones en la comunicación, y generar un mensaje simple y sencillo, Einstein decía si no lo puedes explicar con simplicidad es que no lo entiendes bien.

Finalmente, las posturas, gestos, miradas y actitudes que pueden tener tanto el emisor como el receptor también influyen en la comunicación y pueden enviar mensajes adicionales que no son parte del núcleo de la conversación, por eso es recomendable cuando se sostenga una conversación prestar atención a la misma, es mejor hacer una cosa bien que dos mal hechas.


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